Páginas

lunes, 1 de mayo de 2017

Viaje por el Avilés Medieval

  Paseo por el Avilés Medieval 

Historia previa al Avilés medieval.

Hay restos romanos en Avilés y alrededores pero pequeños y muy dispersos. Se piensa que el nombre de Avilés tiene origen romano y se bebe a un patricio romano que podría dar nombre a la Villa, Vilnius. 
Pero no tenemos constancia de ninguna Domus ni nada por el estilo. La ciudad romana importante era Gijón.

Historia medieval. El Fuero y los privilegios.

El territorio en el que se encuentra actualmente Avilés se domina desde el Castillo de Gauzón durante la época medieval, de Avilés hasta el Cabo Peñas. Curiosamente El Concejo de Gozón que se encuentra en dicha zona lleva hoy su nombre.

Cuando la capital del Reino de Asturias pasa a León, Aviles pasa a ser un importante puerto del reino entre otras cosas suministra a la capital pescado se piensa que por El Camín Real de La Mesa o por Pajares.
Existen dos copias de El Fuero de Avilés que parecen indicar que su fundación es en el año 1085. Estos textos parecen estar en latín protoromance con importantes semejanzas con el asturiano lo cual ha dado mucho que hablar.

El fuero significa la constitución de la Villa y da privilegios a sus habitantes. Prohíbe que haya nobles o lo que es lo mismo que iguala a los nobles con el resto de los vecinos no concediéndoles privilegios. Para ser vecino de Avilés había que tener casa en ella y además demostrar que se vivía en ella.

Por tanto los impuestos los pagan los vecinos de la Villa de Avilés a la villa y no a un Señor. Entre esos privilegios se encuentra el no tener que pagar peajes por ejemplo para llevar mercancía a León o prácticamente a cualquier lugar de España.

Están también libres de pagar portazgo (del que son herederos los peajes de las autopistas) en prácticamente todos los puertos de España. Entre otras cosas de esta manera la Villa de Avilés pretende atraer población. Esto me hace pensar por cierto en la parada de metro de Madrid, Portazgo.
 
Fernando IV amplía los privilegios de los vecinos de Avilés allá donde vayan salvo en Toledo Sevilla o Murcia.

 Avilés Medieval sobre el plano.

La villa medieval de Avilés tenía dos calles principales cruzadas por otra formando una H mayúscula.  Tenía 5 puertas. Las dos puertas principales son la Puerta del Alcázar y la de Cimadevilla. Fuera de sus muros se encuentra Sabugo El Arrabal pescador.
La Puerta de Cimadevilla se abría al Camino de Grao, por la actual Calle Galiana. La Puerta del Alcazar al Camino de Oviedo, que se encontraba a una jornada a pie, 30 kilómetros. Actualmente es la Calle del Ribero.  

Al norte La Puerta de la Mar, donde esperaban los barcos para recoger mercancia, y atravesando el Puente de Sabugo, al Arrabal de Sabugo.  Al este, otra puerta se abría al Camino de Gozón, atravesando el Puente de San Sebastián, destruido en el siglo XIX siendo sustituido por otro de hierro. A su salida está hoy el Centro Niemeyer.

Por último, al oeste se abría la Puerta de Cabruñana o de los carboneros, hacia el Camino de Santiago o de Galicia, hoy Calle de la Cámara.

Comienzo del Viaje.

Estamos extramuros, en la zona más alta, en la Plaza de Cimadevilla, (observando el plano metálico de la ciudad medieval). El Ayuntamiento se asienta sobre el lugar en que se apoyaba la muralla medieval. Unas losas negras a la izquierda del mismo nos indican donde se hallaba la misma.

Descendemos por esta calle principal (actual Calle de la fruta) recordando que en 1309 Fernando IV amplía el término de Avilés a; Corvera, Illas, Castrillón, Candás y Luanco. Candás y Luanco también les habían concedido estatus propio en 1270 lo que provocó más de un litigio.
Lugar casa del concejo, Avilés Medieval
Lugar de la Casa del Concejo.

Parada 1. Casa del Concejo.

Aquí se encuentra una edificación roja que entonces no existía, donde se encontraba otro edificio que era la Casa del Concejo.

Antes de que la hubiese, el Conceyu o Concejo se reunía en la iglesia o en el cementerio. En dichas asambleas se elegían alcaldes y jueces. Curiosamente los alcaldes eran los que juzgaban y los jueces los que mandaban.

Parada 2 El mercado medieval.

Avilés, Mercado Medieval
El Mercado Medieval
La actual Calle de Ferrería era la "Calle Mayor" y toma su nombre del lugar en que se desarrollaba la actividad de los ferreros o herreros. Durante largo tiempo se les intento echar de ahí ya que eran fuente de incendios.

El Mercado medieval, tiene dos grandes puertas, y se observan polletes dónde poner un travesaño para un toldo y cuatro ventanas arriba donde se encuentran los aposentos de la familia del mercader.

Soportales de la Calle La Ferrería

Parada 3. Soportales.

Los soportales de la Calle de Ferrería descendiendo a la Plaza de San Nicolás, se encontraban aquí para poner tiendas.  Los soportales eran de madera lo cual era un problema en los incendios.

Avilés era una importante villa comercial. En ciertos años Los Reyes Católicos eliminaron las Alcabalas (impuestos que ponían los Reyes o las villas durante el medievo a sus pobladores).

Parada 4. Iglesia de "San" Nicolás. Actual Iglesia de los Padres Franciscanos.

Avilés, Avilés medieval, románica, románico, santa claus, papá Noel
Iglesia de Nicolas de Bari
En la parte más baja de la Calle Ferrería, muy cerca del mar, se abre ante nosotros una pradería y una iglesia. La actual Iglesia de los Padres Franciscanos era entonces la Iglesia de Nicolás de Bari. Se trata del edificio más antiguo de Avilés y data del siglo XII.

Los mercaderes eran muy devotos de "San" Nicolás, el cual además de ser Papá Noel era invocado por sus fieles en los naufragios. El hecho de ser Avilés una villa de mercaderes con puerto de mar, hacía que mantuviese contacto con gentes de ultramar, que trajeran consigo la devocción a este obispo.

La portada de la iglesia es románica y la única parte de la iglesa original. Se
Portada románica, Nicolás, Avilés, Paseo por Avilés medieval
Se observa el arco de medio punto y el taqueado jaqués
encontraba al lado del puerto lo cual daba a la Villa de Avilés imagen de poderío, de riqueza económica. Es fácil de entender este hecho al observar la rica ornamentación de la portada, y que se observa en la imagen. Talladores profesionales bien pagados eran necesarios en este tipo de trabajo.

A nuestra izquierda, (a la derecha de la iglesia) se encuentra la Capilla de Pedro Solís. Fué levantada en 1499 y es de estilo gótico como podemos observar en su arco apuntado.
Capilla Pedro Solís, viaje por avilés medieval
Portada de la Capilla de Pedro Solís

La familia Solís era una familia aristocrática que con este tipo de edificación se hacía propaganda en la villa al tiempo que competía con otras familias aristocráticas y se daba a conocer en ultramar (recordemos que la Puerta del Mar se encuentra a pocos metros a nuestra izquierda). Para que no quepa ninguna duda, pusieron su escudo encima del arco. Hoy el albergue de peregrinos de la ciudad de Avilés lleva su nombre.
A su lado, caminando hacia nuestra izquierda se encuentra el cementerio. No solo nos encontramos ante un lugar de reunión, sino que también es un lugar por el que todos los villanos pasan a "visitar a sus muertos". Este lugar tan visitado es aprovechado por otra familia aristocrática para darse a conocer.

propiedad privada, paseo por avilés medieval
Capilla de los Alas
Así, en frente, a unos metros, se encuentra la Capilla de los Alas ( por desgracia una verja nos impide el paso ). Esta familia ostenta el cargo de Alférez Mayor, siendo por tanto los gobernadores militares. Como decíamos más arriba, el estar el cementerio a la entrada le daba mucho prestigio ya que tarde o temprano todo el mundo tenía que pasar por allí. Al igual que los Solís, tenían una especie de capilla privada con su escudo en una parroquia urbana, lo cual en la época era un honor reservado a muy pocos.

Recordemos que se trata de aristocracia laica, ya que en Avilés no había obispo como en Oviedo y por tanto solo debían responder ante el Rey.

Parada 5. Puerta del Mar. Plaza de Cai.

Bajamos la calle a la izquierda del cementerio, buscando el rumor de las olas, y atravesando la Puerta del Mar, extramuros, llegamos a un embarcadero. Actualmente ya no se encuentra aquí el puerto.

En este lugar estaba la Puerta del Mar.
Desde aquí se exporta madera, hierro, fruta y frutos secos entre otras productos y se compraba paño de Flandes y de Inglaterra, de mejor calidad que el nacional. Ingleses y holandeses llegaban con frecuencia a este puerto, trayendo consigo no solo sus productos, sino también costumbres, lengua, santos, y otros elementos de su cultura.

De la Puerta del Mar pasamos a la Plaza del Coi para atravesar el Puente de Sabugo. A nuestra derecha dejaríamos el Campo del Faraón, hoy el Parque del Muelle.

Parada 6. El Alfolí. 

En vez de avanzar hacia el Arrabal de Sabugo, rodeamos la muralla en dirección Camino de Gozón para entrar de nuevo a la villa por la Puerta de San Sebastián. Al girar el recodo un nuevo olor característico invade nuestras fosas nasales, el alfolí.
Calle Alfolí, Paseo por Avilés Medieval, Avilés medieval
Calle Alfolí

El alfolí era un almacén de sal muy importante durante toda la época medieval para hacer salazones así como para curar el cuero. Según va pasando el tiempo, la sal pasa de ser un artículo de lujo a un condimento barato.

El pescado sin sal se estropeaba en el puerto o durante el viaje a León, y la piel sin curar a la sal se pudría (el proceso del curtido era complejo y maloliente; sal, orina y estiercol). Por tanto, el mercadeo de la sal al igual que las salinas eran monopolio real. Las salinas se encontraban todas en zonas de mar salvo en el centro de Castilla, en algunas minas como en Villafáfila. 

Ya hemos dicho que la sal de Avilés era muy importante para los salazones de pescado que después se vendían en el resto del reino, de tal manera que Avilés era el único centro de Asturias que producía, vendía y compraba sal. Por ejemplo compraba sal a Lisboa. Actualmente, al otro lado del Estuario del Tajo, en Lisboa se encuentran las lagunas ricas en aves acuáticas que por entonces era salinas. Dichas lagunas se observan fácilmente con el GoogleEarth.

Posteriormente otros puertos como el de Ribadesella, el de Llanes y alguno más empezaron a ser centros autorizados del mercadeo de la sal. Los impuestos de la sal, como tantos otros estaban arrendados generalmente en manos de población judía. A la población judía no les importaban los problemas de usura que tanto importaban a la Iglesia Católica.

Parada 7. La Casa/Palacio/Torre de los Alas.

Palacio de Camposagrado.
Continuamos por la calle en dirección oeste, dejando a la derecha la Iglesia de Nicolás de Bari hasta llegar a la Casa de los Alas. La casa en principio pequeña va creciendo hasta convertirse en el Palacio de Camposagrado.

La casa crece (ver imagen adjunta) y llega un momento en que no solo se apoya en la muralla sino que sube por encima de ella. Sus continuas extralimitaciones llevan a la familia Camposagrado a un pleito con otra familia aristocrática con los Calabazas.

Fruto de este enfrentamiento se hace construir sobre la muralla una puerta que hoy es visible sobre la muralla, bajo la Torre de los Alas. Por esa puerta pasaban los soldados cuando hacían la ronda, entrando dentro de la Casa de los Alas que ya eran en ese momento los Marqueses de Camposagrado .
Crecimiento de la casa, Avilés medieval
Crecimiento de la Casa
No solo los Marqueses de Camposagrado apoyaban sus casas sobre la muralla también lo hacían muchas otras familias ya que se ahorraban un muro. Si además lo hacían a continuación de otras podrían ahorrarse hasta dos o tres muros.

Las murallas eran muy importantes para proteger la villa. La propia nobleza no dudaba en caso de necesidad en atacar con ánimo de saquear las ciudades. Por ello muchas de las entradas a las ciudades estaban bien flanqueadas y frecuentemente con codos que obligaban al presunto invasor a entrar en fila india.

Parada 8. Sabugo.

Torre de Camposagrado, muralla, puerta, Avilés Medieval
Torre, puerta y muralla.
Volvemos a la Puerta de la Mar y esta vez cruzamos el Puente de Sabugo. Sabugo no es un arrabal en sentido estricto porque no está pegado a la muralla. Se trata de un barrio de pescadores que nace y crece a la vez que la Villa de Avilés pero es gobernado desde la villa, y a la villa paga impuestos.

Aquí en Sabugo encontramos la Iglesia de Santo Tomás de Canterbury. Tomas Becket fue Arzobispo de Canterbury en Inglaterra y ajusticiado por el Rey Enrique II. La Iglesia Católica lo canoniza tras el incidente convirtiéndolo en martir.

No es raro qué pueblo de pescadores de Sabugo fuera devota de un "santo" inglés ya que ingleses, franceses y holandeses frecuentaban entre otros la Villa de Avilés con la cual mercadeaban.

Iglesia Tomas Becker
La Iglesia está en un barrio obrero-pescador de la villa. Solo conserva el tejaroz de entrada. En su margen derecha hay una bancada a los pies donde se reunia la Cofradía de Oficios de Pescadores y Mareantes de Avilés, gremio como tantos otros con capacidad de autolegislarse. Por ejemplo cuando se sale y cuando no se sale a la mar, a qué puerto se puede ir, con qué puerto se puede comerciar etcétera.

Parada 9. Soportales y horreos. 

Volvemos hacia la villa bajando por la actual Calle de Bances Candamo. De nuevo tenemos ante nosotros el pasado comercial de Avilés, pero esta vez en Sabugo. Prácticamente toda la calle está flanqueada de soportales.

Avilés medieval
Soportales en Sabugo
Al final de la calle, se abre una plaza, la cual tiene al frente el camino de salida de Sabugo. Una línea de horreos la adorna de este a oeste. Muy importantes durante el medievo como almacenes de alimentos para el arrabal, se quedaron sin uso con el tiempo y hoy ya no existen. 

Parada 10. Calle de Ruipérez y Cabruñana.

A San sebastián, Avilés y A Coruña se le encargan barcos para conquistar Sevilla en 1230. Donde actualmente se encuentra la Torre del Oro había una torre. Entre esta y otra que había al otro lado del rio una larga y fuerte cadena impedía el paso de barcos. Parece ser que para romper la defensa de Sevilla rompieron la cadena y de ahí que el escudo de Avilés sea un barco rompiendo una cadena. Fue Ruipérez quién guío a las marinas a la Victoria y de ahí el nombre de la calle.

Avilés medieval
Calle Ruiperez
Giramos por un camino a la izquierda llegando al Camino de Galicia, actual Calle de la Cámara. Al final del todo, a la entrada a la villa por la Puerta de Cabruñana. La Calle Cabruñana toma el nombre del trabajo profesional relacionado con la manufactura de las pieles y del cuero que allí se llevaba a cabo y del cual se ha hablado con anterioridad.

Parada 11. Cruce de Caminos. 

Entrando al corazón de la villa por la Calle Cabruñana, no encontramos un cruce de caminos; Galicia, Gozón y Grao. Esta confluencia de caminos es hoy la Plaza de España y se encuentra el actual ayuntamiento. La Calle Cabruñana era la más despoblada y también la mas larga, extendiéndose hasta la Puerta de San Sebastian al este, y comunicando al sur con las Puertas de Cimadevilla y Alcazar.

Subiendo hacia la zona más alta de la Villa de Avilés, Cimadevilla, observamos al fondo, sobre una colina extramuros camino de Grao, un convento franciscano. Tomamos este camino, dejando a nuestra derecha el Camino de Oviedo (a una jornada a pie). El Camino de Oviedo es la continuación de la Calle de Rivero.

Parada 12. Convento de los Padres Franciscanos.

En el siglo XII una orden religiosa que daría lugar a interesantes corrientes herejes estaba naciendo, la Orden Franciscana. Las cruzadas y el incremento demográfico influyeron sobre el crecimiento de las ciudades y el comercio. Este es el caldo de cultivo de esta orden fundada por Francisco de Asís, de vida mendicante que viven de lo que les da la gente y que tiene la misión de reevangelizar a la sociedad. Con este fín, llegan a las ciudades más ricas de España entre ellas Avilés.

Muchos recordamos a la Orden Franciscana del extraordinario libro "El nombre de la rosa", que hace referencia a franciscanos tan interesantes como Guillermo de Ockam o a herejes tan interesantes o más como son los Fraticelli.

En Avilés se colocan a extramuros, fundando el convento de San Francisco del Monte actual iglesia de San Nicolás. En ella habitan franciscanos, clarisas (también de la orden franciscana) y tras una desamortización se envían a los pocos franciscanos que quedan a la antigua Iglesia de San Nicolás. Así, el Convento de San Francisco del Monte pasa a llamarse la Iglesia de San Nicolás y viceversa.

Fin del Antiguo Régimen.

El Fuero de Avilés, como el resto de los fueros van perdiendo su eficiencia hasta el siglo XVIII en el cual termina el Antiguo Régimen. Sin embargo no son abolidos hasta el siglo XIX con el advenimiento de Nuevo Régimen que perdura hasta hoy.


Y bueno, que si habéis llegado al final y os ha interesado lo mismo podéis añadir algo para que el próximo paseo de todos por Avilés sea mas rico. Espero pues tu comentario...

Un abrazo y dame un tic si te gusta ;-)

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Agradezco tus comentarios. Tu opinión cuenta.....